REPUDIO A LA VIOLENCIA SUFRIDA POR EL PENSADOR RUSO ALEXANDER DUGUIN
En el mes de noviembre de 2017 bajo el auspicio del Centro de Estudios Económicos y Sociales (CEES), tuvo lugar en el local de la Confederación General del Trabajo (CGT) en la calle Azopardo 250 (CABA) la presentación del filósofo ruso Alexander DUGUIN, asesor consultor del presidente ruso Vladimir PUTIN.
La recepción del mismo ante un auditorio de libre concurrencia, fue efectuada por el Secretario de Derechos Humanos de la CGT Julio Piumato, el Profesor Alberto Buela y el Licenciado Marcelo Gullo.
A la disertación se había convocado un numeroso público expectante compuesto de obreros, fueran o no militantes sindicales, estudiantes de distintas carreras y algún número menor de estudiosos de los temas históricos o políticos.
El expositor invitado, sin ayuda de intérpretes, pero en un castellano comprensible agradeció a los convocantes y a los presentes la concurrencia. Seguidamente comenzó la disertación sobre sus temas de geopolítica y su interpretación filosófica de la misma.
A fin de sintetizar un vasto temario en base a las grabaciones que obtuve de él, hago un resumen de los conceptos que considero medulares de la exposición y a la vez aptos para el cuestionario posterior y consiguiente intercambio de ideas.
Comenzó así:
A. DUGUIN: “La geopolítica no es sólo un método para determinar estrategias y procederes políticos, la geopolítica es más que eso. Siguiendo a Carl Schmitt en su trabajo la Tierra y el Mar se da una pauta fundamental para entender qué es realmente la geopolítica. Esos dos conceptos son la tierra y el mar y son los que definen qué es realmente y para qué sirve. Sin ellos no es posible, o es muy difícil comprender por ejemplo el puesto de la ARGENTINA en el mundo y el continente sudamericano.
Schmitt con la definición de la tierra la define como la que hace posible una forma decivilización, no es el elemento físico o material, es el paisaje inmutable que ontológica y axiológicamente hace posible la eternidad que nos da el SER. Es permanente imperturbable siempre es igual, pero también distinta. Es como el verano o los veranos que siempre vuelven todos los años, pero que pueden ser distintos en cada regreso, porque son vivientes.
Alrededor de este eje se establecen en la sociedad los valores, las jerarquías y desde ese momento se establecen con relación al ser las jerarquías superiores. Esa jerarquía ontológica es la que sustenta los valores más altos el estado, la cultura las relaciones humanas o de familia.
En la cúspide de esa jerarquía están los más sublimes o los filósofos que están siempre cerca del saber y los grandes valores, siempre en condiciones de dar más que recibir. Les siguen los que ponen en valor al coraje más que a su propia vida que son los guerreros. Y finalmente le siguen los que producen las cosas y elaboran el sustento por el trabajo, que son los labriegos capaces de entrega por el trabajo, entendido como un valor en sí mismo, como algo noble y sagrado. Traduciendo el acto de dominar la tierra tomando sus frutos.
Estas tres expresiones de la jerarquía ontológica: el filósofo o sabio que sólo busca la verdad eterna, el guerrero, no sólo como soldado, sino como defensor en todo orden de la vida contra la muerte y el labriego que provee con su sacrificio los recursos para hacer posible la vida. En estas expresiones se funda la civilización de la tierra, pero no para el valor del cambio no por el interés, no para el capitalismo o el mercado. En definitiva, no para la explotación. Esta civilización de la tierra, tal como se formulara ya en el cristianismo, es según Carl Schmitt la base metafísica del continentalismo.
Esta base, aunque no esté expresada en el hecho presente igualmente existe porque al tomar conciencia de ella a escoger y tomar la decisión geopolítica de concretarla. En definitiva, escoger entre la civilización de la tierra o la civilización del mar.
No es posible de otra forma, porque la tierra es anterior al mar. El mar llega después de la tierra, representa la mutación, pero no la permanencia. La civilización del mar, siempre siguiendo a Schmit, está basada sobre el cambio. El mar no puede ser organizado o demarcado como la tierra, es líquido y es descarnado. Tiende a las alianzas por tráfico y prescinde de las jerarquías. Su misma esencia fluctuante permanentemente va llevando a distintas partes, hace preponderante el mercadeo o el comercio, es consecuente con la era de los grandes descubrimientos geográficos. Busca la liquidación, en el sentido comercial de la liquidación de los valores. Y en definitiva está en la génesis del capitalismo que es un hijo del mar. Así como la modernidad y la ciencia moderna, que de ellas también pende el destino de occidente.
Esta elección, tierra o mar, esta decisión humana es antes que todo espiritual. Después es cultural, después es histórica, después es política.
Dice también Schmit que en la historia las dos raíces históricas los anglosajones y los ibéricos castellanos portugueses tienen distintas formas de comprender la colonización. Los primeros han traicionado la tierra se han convertido en los hijos del mar, al pasar por él lo han escogido como destino. La costa para ellos es el lugar adonde llegar robar, salir y volver al mar. En definitiva, su visión de la tierra es siempre desde el mar para la explotación, esa y no otra es la razón creadora del imperio colonial británico.
Los segundos, especialmente los españoles, llegaban por el mar a la tierra y la apropiaban como provincias, dejando su impronta. Recreaban hasta en los nombres su lugar de origen. Hoy todavía los nombres de origen español quedan por toda Iberoamérica como prueba de ello.
Así entonces, detrás de la pugna inter imperial que terminó con la victoria anglosajona sobre la “armada invencible” ibero castellana late el conflicto geopolítico entre la civilización del mar y de la tierra. Pero antes que geopolítica hubo una evidente cuestión metafísica anterior y profunda.
He recorrido estos aspectos de la historia conocidos para personas instruidas como ustedes, porque lo he considerado imprescindible para acercarnos al hoy.
¿Y dónde estamos hoy? Estamos en que con el triunfo del imperio anglosajón se ha impuesto globalmente la civilización del mar y se ha impuesto el capitalismo cuya forma ideológica es el liberalismo. Su centro mundial fue Londres hasta el fin de la Primera Guerra Mundial, a partir de entonces comenzó paulatinamente la transferencia de la civilización del mar a Nueva York, pero siempre dentro del marco anglosajón.
Después de la Segunda Guerra Mundial el centro de la civilización del mar llegó a su culminación. Y durante la Guerra Fría disimulado entre el enfrentamiento entre el liberalismo del mundo anglosajón y el totalitarismo materialista del régimen de la UniónSoviética geopolíticamente hablando, continuó dentro de la guerra ideológica de los continentes, el conflicto permanente de la tierra y el mar. Tras la caída de la Unión Soviética la civilización del mar, quedó a cargo de la administración global y apareció como es en el fondo una civilización sin raíces, una civilización basada en la explotación.
Volviendo entonces a Schmitt, siendo desencarnada y sin límites como el mar, tiende a la liquidación de los valores como en un gran mercado. Mercado en que los valores son reducidos a simples precios, en desmedro de los primeros. Y a sabiendas de que los valores no se pueden comprar, como no se compra lo sagrado, así tampoco se pueden comprar las raíces históricas.
La victoria de la civilización del mar sólo es posible si los pueblos pierden conciencia de sus raíces históricas.
Como única conclusión que puedo aportar desde mi raíz es la experiencia de Eurasia. La idea de Eurasia como realidad es una identidad geopolítica que tiene presente a Rusia no como el país o el Estado Nacional, sino como la civilización de la tierra que quiere conservar su forma tradicional contra la civilización del mar. En esta lucha está también nuestra tradición cristiana ortodoxa y aún la de otras religiones que se reconocen en la misma raíz histórica y en la misma vocación de eternidad.
¿Y cómo es posible sustraerse a la imposición de los valores únicos de la globalización en detrimento de las propias raíces? Es posible a través de la unidad de los continentes, que es el retorno a la civilización de la tierra o sea, buscando la unión continental.
Para Argentina el Continentalismo de Juan Perón debe ser comprendido para Iberoamérica como la civilización de la tierra, porque esa es la esencia del Justicialismo que está en contra del liberalismo capitalista, en contra del materialismo comunista y a favor del trabajo con raíz histórica propia. Que es a su vez donde están los ibéricos españoles, portugueses y también los aborígenes criollos. Allí donde sus lenguas en común se encuentran, allí está la civilización de la tierra, la verdadera ontología del ser. Esa es la verdadera civilización en contra de la del mar y también la forma de sustraerse del leviatán de sus tentáculos de dominación por la globalización.
Finalizando esta introducción, quedo a disposición para las preguntas de ustedes, muchas gracias” (Transcripción literal)
Seguidamente se produjo un intercambio de preguntas y consiguientes respuestas del expositor, ampliando la serie de conceptos antes resumidos pero ahora con mayor extensión excusándose en todos los casos, con una sobria cortesía de responder sobre cuestiones de política interna argentina.
A mi turno y a partir de esas pautas, formulé mis preguntas acentuando el aspecto geopolítico de Rusia y su vocación de acceso a los océanos.
CARLOS MORENO: Profesor, Ud. ha hablado de los tiempos de la guerra fría como una transpolación de la lucha entre el mar y la tierra, si yo lo he entendido bien. El mar en la concepción anglosajona de dominar las costas los pasos interoceánicos y la tierra, entendida como se lo hace en Rusia, de conservar la madre tierra. El pensador geopolítico anglosajón Nicholas Spickman decía al respecto que a Rusia se la vencía cercándola, extendiendo en su entorno un collar de bases que le impidiera su libre salida al mundo exterior. La pregunta es: ¿Algo ha ocurrido a acontecimientos presentes (año 2017) hoy en Siria que permita decir que ese cinturón se ha roto y que Rusia ha conseguido salir a aguas calientes?(*)
A. DUGUIN: “Es verdad muy correcta, Spickman de verdad acentuaba esta zona “rimland o tierra orilla” desde Europa Occidental hasta China o hasta Corea, es verdad nosotros queríamos romper esa vieja estrategia anglosajona de limitar nuestra salida a los mares. La victoria en Siria es mucho más grande de lo que se expresa aquí en Occidente, es la primera vez que nosotros entramos libremente en los mares calientes. (**)
Hay una cosa aún más importante, nosotros luchábamos para salir a aguas calientes contra Turquía e Irán sin ningún resultado y nosotros hemos aprendido y hemos cambiado esa estrategia, derivada de los errores de la imposición de la etapa soviética. Aún siendo tan fuertes como para luchar contra ambos a la vez, hemos sustituido el enfrentamiento por la creación de ejes de coincidencia, Moscú y Teherán y Moscú y Ankara. Dos imperios distintos, el iraniano y el turco, pero cercanos a nosotros por tierra. De religiones diferentes shiitas y sunníes y nosotros ortodoxos, pero capaces todos de comprensión y de luchar por la defensa común de las raíces históricas de cada uno. Eso demuestra la validez de la estrategia de bloques, no sólo entre amigos lo cual es claro y fácil, sino aún entre diferentes, pero capaces de construir la unión a pesar de ello.”(***)
La exposición inicial derivó en un diálogo vivo entre quienes habíamos escuchado la exposición de un tema convocante para todos y el expositor se avino a él con interés y en una atmósfera cordial.
Resulta innecesario abundar en todas las preguntas de diferente precisión, aunque todas muy respetables, así que asumo la responsabilidad de repetir algunas de ellas y brevemente su respuesta:
¿Qué opinión le merece la acusación de que Rusia habría intervenido en las elecciones norteamericanas favoreciendo a un candidato?” ()
A. DUGUIN: “Creo que eso es sobrevalorar a la Federación Rusa y sus posibilidades, no es más que la elucubración de algunos medios periodísticos, ignoro con qué objetivo”.
“¿Ud. le encuentra similitud o diferencia a la gestión del Presidente Putin con la gestión del Presidente Perón?”()
A. DUGUIN: “En la medida en que Putin ha logrado concitar y proclamar las raíces históricas del pueblo ruso en su defensa por supuesto, pero debo decir que hay una tarea que está pendiente y es que Perón al crear una doctrina y predicarla en el movimiento trabajador, les garantiza a Uds. un futuro de continuidad que en Rusia estamos tratandode concretarlo”.(****)
La visita del filósofo Alejandro Duguin, asesor del presidente ruso Vladimir Putin, a la Argentina no tuvo un gran eco mediático. La opinión política oficial no se dio mayormente por aludida, lo cual resulta obvio y siendo por su parte también algo tibia en sectores de la oposición.
Tampoco hubo un eco mayor en el mundillo intelectual, lo cual vuelve más llamativa la recepción ocurrida en el ámbito de la organización sindical. Allí con el marco de distintas opiniones el visitante fue escuchado y si tal vez hubiera que ampliar la valoración quizá hubiera dado para un curso algo más extenso, que permitiera de su parte algunas aclaraciones acerca de su percepción de la geopolítica continental latinoamericana. Pero esto no es más que un comentario a posteriori y no invalida el esfuerzo hecho y el tema sobre el que fue invitado a desarrollar.
Lo concreto es que un disertante venido del otro lado del mundo tuvo oportunidad de exponer su versión filosófica sobre la doctrina continentalista de Perón y en el idioma de los propios dueños de casa, haciéndolo a partir de su pertenencia a la Rusia actual y lejos de los esquematismos ideológicos que en otras épocas había en su país sobre Perón y su doctrina.
En la casa por excelencia del movimiento obrero organizado argentino, adonde alguna vez reposaron los restos de Eva Perón, un intelectual ruso dio su versión acerca de un movimiento político esencialmente argentino y latinoamericano y fue escuchado casi en exclusividad. En modo alguno puede ser considerado un hecho menor.
Diciembre de 2017
NOTAS
(*)
El geopolítico norteamericano Nicholas Spickman representó al teórico actualizador por excelencia en el siglo XX de la doctrina MONROE, acerca del predominio de los EE.UU sobre Latinoamérica. Fallecido en 1943 en plena IIGM y antes de que la situación político militar se definiera a favor del bando aliado. Sus trabajos, editados con posterioridad, igualmente fueron premonitorios sobre la valoración estratégica que debía prevalecer para los intereses anglosajones en la postguerra expresados antes que la Unión Soviética adquiriera el carácter de vencedor definitivo y que la China, también invadida por Japón y con una guerra civil en curso, lograra su unificación estatal.
Sobre aquellos momentos , también decisivos para la Argentina, el Presidente Perón en su última gestión y a meses de su fallecimiento, recordó esos episodios en su mensaje dirigido a la Cumbre de Países No Alineados (MNOAL), celebrada en Argelia en Setiembre 1973:“Cuando en el año 1943 un grupo de hombres de armas decidimos liberar al país de la dependencia extranjera haciendo una verdadera revolución nacional, debimos enfrentarnos también con un triste y agobiante panorama mundial”. () “Para nosotros el panorama del mundo era desolador puesto que después de la guerra mundial, el seguro reparto de las Naciones por los dos colosos triunfantes, colocaban a las mismas en un marco de desesperanza debiendo elegir el ceder a la explotación del capital imperialista demo liberal o a la del estado colectivista dogmático, convertidos en amo absoluto de la vida de sus pueblos.”(lit.)
(**)

La vieja aspiración rusa acerca de obtener puertos marítimos libres y operables todo el año, encuentra con la salida al Mediterráneo Oriental una gran culminación. Nunca antes lo había conseguido con esa certeza y magnitud. Por el acuerdo con Siria entregando por 49 años el puerto de TARTUS en la provincia de Latakia para ser convertido en base naval con capacidad operativa y un gran astillero de reparaciones navales, se ha asegurado a Rusia una presencia permanente en el lugar. Complementándose sus defensas militares con una base aérea con centrales autónomas de detección satelital y desplegando sus, por hoy incontrastables, sistemas misilísticos antiaéreos S-500.
Sobre esto el ministro de defensa ruso Sergei Shoigu expresó:“RUSIA por primera vez en su historia tiene sus fronteras completamente protegidas con un sistema de alerta temprana. El Pentágono debe valorar esta información de una manera extremadamente seria”. SPUTNIK (lit.)

Con este despliegue Rusia consolida su arco de protección en el área sur del Cáucaso, reasegurándose contra las acciones del fundamentalismo terrorista islámico, ratificando su influencia geopolítica en el Mediterráneo Oriental y en los accesos al Mar Rojo. Así como también logrando mejores condiciones para proteger sus instalaciones gasíferas destinadas a mediano plazo a reabastecer a toda Europa.
(***)

En 2017 en la provincia siria de IDLIB, se había arribado a un acuerdo turco-ruso-iraní de pacificación regional. Pero a comienzos de 2020 se desencadenó allí un sangriento conflicto que destruyó este acuerdo, implicando en el mismo a fuerzas sirias y aún de la misma Rusia contra Turquía, con elevado número de bajas en todos los bandos. Esto desencadenó paralelamente una gran matanza de pobladores y la consiguiente migración a países vecinos.
En febrero de 2020, tuvo lugar la Conferencia Mundial de Seguridad que se cumplió en Múnich y en la que el canciller ruso Serguei Lavrov aportó en una serie de precisiones explicativas, la visión geopolítica de su gobierno en el conflicto ,diciendo en la apertura: “El Presidente de Rusia, Vladimir Putin, formuló la idea de la creación de la Gran Asociación Euroasiática que esté abierta para todas las asociaciones y Estados de nuestro enorme continente común, incluidos los países miembros de la Unión Europea.”(lit.)

En la posterior rueda de prensa Lavrov respondiendo al periodismo amplió su visión:
PREGUNTA (BRIT.): ¿Qué definición ofrecería a estas relaciones, son Rusia y Turquía países aliados o países rivales?
CANCILLER: “Tenemos muy buenas relaciones con Turquía. Pero ello no quiere decir, sin embargo, que tengamos que mostrarnos de acuerdo en todo.”
PREGUNTA (DEUSTCH): Creo que sus declaraciones con respecto a Siria no son del todo convincentes.
CANCILLER: “El conflicto sirio estalló durante la llamada “primavera árabe”, cuando fue destruida Libia y se balanceó Túnez al borde del abismo y toda una serie de los países de la región. Al asediar Damasco en verano de 2015 los extremistas y los terroristas, nadie se planteó ninguna norma humanitaria ni proceso político, todos estaban pendientes del desenlace militar, cuyo resultado fuera el derrocamiento del Gobierno de Bashar al-Asad. Rusia reaccionó así a la llamada de auxilio por parte de este Gobierno legalmente elegido”. (lit.)
Anteriormente al cierre el Canciller hizo una referencia a la visión común de la confluencia de estados implicados en la guerra de Siria: “Nos unimos en nuestro deseo de no permitir la destrucción de la República Árabe de Siria, cuna de numerosas y grandes religiones y civilizaciones, donde a lo largo de siglos y milenios coexistieron los musulmanes, los cristianos y los representantes de otras confesiones, con el deseo de garantizar que reine la paz en Siria y que sea iniciado el diálogo político”.(lit.) Fuentes BBC NEWS y Red VOLTAIRE
(****)

Indudablemente que a la visión escuchada a Duguin, nuestro visitante ruso de 2017, le encontramos una concordancia genérica de cuestiones en las que descuella la idea continental con la doctrina ya esbozada desde 1948 por el gobierno argentino, también presidido por el General Perón, ratificada en el ya citado discurso leído en su nombre en septiembre de 1973, en la Cumbre de Argel cuando refería: “Si los diversos continentes no se unen estrechamente, llegará el día en que faltando los alimentos y las materias primas, que ya están en plena escasez mundial, veremos a los fuertes tomar desconsideradamente aquello que no les pertenece, anexando o eliminando según sus conveniencias a los países como si fueran meros juguetes. Tal vez lleguen a dominarnos telefónicamente. Ayer fue la época de las Naciones Unidas, hoy es la época del Continentalismo y muy en breve será la era del Universalismo. Es preciso trabajar unidos, solidarios y organizados respetando siempre las costumbres y la soberanía de los demás pueblos”() “Nuestros trabajadores están conformando ya la Confederación General del Trabajo Continental, eso es un paso muy importante”. (lit.)
Las citas de la Conferencia de Argel 1973 MNOAL, han sido tomadas de la GUIA 1976 del 3er MUNDO,Edición TP. Bs As, 1975.